La sociedad civil como reguladora del Estado y el mercado

Especialistas de distintos campos disciplinares se reunieron para debatir los aportes de un libro colectivo coordinado por el padre Juan Carlos Scannone.

04-11-2019

Expertos en sociología, política, religión, educación, historia, administración, medicina, filosofía y otros campos disciplinares se encontraron en la Sede Rectorado Centro de la UNTREF para discutir los aportes del libro Sociecad civil y bien común. Hacia una nueva articulación del mercado, el Estado y la sociedad civil, coordinado por el padre Juan Carlos Scannone, coincidiendo con su planteo de base: que es imperioso cambiar el régimen del capitalismo financiero hacia una economía del don enfocada en el provecho social. 

“Vemos que las relaciones entre estas tres instancias –la del mercado, el Estado y la sociedad civil– están muy inestables en todo el mundo, como se aprecia en los casos de Chile y Ecuador”,  comentó en la apertura Francisco Piñón, docente e investigador de la Universidad. 

“Existe una inquietud sobre esta temática que todos habitamos, la injustica lamentable y permanente en términos de distribución de bienes económicos y sociales, la tensión entre incluidos y excluidos, por eso el campo de las ideas necesita recrearse con fuerza para generar algún cambio en lo vincular”, señaló por su parte José Tasat, coordinador del Programa de Pensamiento Americano, espacio organizador del encuentro junto al Programa de Políticas Culturales Patricio Lóizaga y la Secretaría Académica de la UNTREF. 

El libro, editado por la Universidad Católica de Córdoba en dos tomos, incluye artículos del Papa Francisco, el propio Juan Carlos Scannone e investigadores de América Latina, Norteamérica y Europa, en los que se les atribuye a la sociedad civil y a los movimientos que se generan en su seno, un rol clave para corregir los desvíos del mercado y el Estado

“Como dijo el Papa, el modelo social que funciona de hecho, mata. Hay que trabajar para transformarlo desde adentro”, apuntó Scannone en la Jornada titulada Sociedad Civil y Bien Común.   

El referente de la teología de la liberación agregó que eso solo podrá ocurrir en la medida en que la sociedad civil ocupe una posición central. “Las asociaciones intermedias tienen un papel específico: tirar hacia adelante del mercado y el Estado, hacer que sean lo que deben ser y no lo que de hecho son”, explicó
Según Scannone, el mercado se ha absolutizado y se ha vuelto regulador de la vida social y familiar, mientras que el Estado, que debería responder al bien común, persigue bienes particulares, ya sea de un partido político o un determinado grupo social. 

“El Papa sostiene que vivimos una única crisis, una crisis socioambiental, cuya raíz es cultural”, continuó el teólogo, y se refirió al paradigma tecnocrático como origen del actual malestar de las sociedades. “Reducimos la madre tierra a mero objeto, sometiéndola, controlándola,  manipulándola”, opinó.

Pero como consta en la publicación, esa construcción cultural en la que se apoyan el utilitarismo y el individualismo está siendo puesta en entredicho. “Ahí están los movimientos populares, donde aun los más pobres, los que no tienen techo, tierra ni trabajo, han formado redes mundiales, a los que el Papa reconoce como protagonistas, hacedores de historia y artesanos”, remarcó el padre, apuntando que también los signos de ese cambio se reflejan en las demandas de una banca y un comercio justo, o en las cooperativas de consumidores. 

Un debate interdisciplinario

Santiago Liaudat, docente de filosofía en la Universidad Nacional de la Plata, expresó que los cambios en los movimientos sociales (los vinculados al género, las disidencias sexuales o aquellos que defienden la causa indígena) cobran especial fuerza en este lado del mundo, tal vez porque también se trata de la región en donde más extendida está la marginalidad social. El profesor también alertó sobre los avances ilimitados de la ciencia y los dilemas que plantea, como el proyecto de trasladar la conciencia a un disco rígido. 

Adolfo Sequeira, ex funcionario del Ministerio de Cultura de Córdoba, acotó que en Europa están surgiendo las llamadas políticas de decrecimiento, que plantean que para mejorar nuestra calidad de vida tenemos que consumir y producir menos. 

Ignacio Rivas, especialista en políticas públicas, llamó la atención sobre la introducción de la lógica mercantil en las iniciativas estatales. “Se quiere cerrar determinada línea de tren porque no es rentable desde el punto de vista operativo, pero se olvida que le da un mayor bienestar a la población, porque le proporcionan acceso al comercio y a la salud, incluso se consume más y se pagan más impuestos, con lo cual los ingresos entran por otro lado”, ejemplificó

Roy Williams, docente de ciencias políticas en la Universidad Nacional de Rosario, se preguntó por las connotaciones negativas del poder. “No hay poder que dispense vida. Mi sensación es que el poder en las sociedades actuales no se ejerce solo para el dominio sino para eliminar la alteridad y la resistencia”, comentó aunque dio lugar a cierto optimismo. “Siempre vimos a América como espacio para el porvenir, de lo proyectual del mundo”, manifestó.

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