Investigadores de la UNTREF producen software industrial para una PyME de Ballester
La Universidad y la empresa ENOD finalizan 2025 con la construcción de un software de análisis de radiografías industriales que se enmarca en los llamados “ensayos no destructivos avanzados”.
15-12-2025
El Laboratorio de Innovación y Fabricación Digital de la UNTREF hizo para la empresa ENOD un software a medida que permite la visualización, procesamiento y análisis avanzado de imágenes radiográficas industriales. De este modo, la Universidad cierra 2025 aportándole un nuevo desarrollo tecnológico a esta PyME de Villa Ballester con la que viene trabajando hace años.
ENOD es una de esas organizaciones que apuesta fuerte a la vinculación y ha tejido alianzas no solo con la UNTREF sino con otras universidades, instituciones del sistema científico-tecnológico nacional y cámaras empresarias para llevar a otro nivel los servicios que ofrece. Según Ignacio Fraile, su socio gerente: “La actividad que realizamos es muy sensible y requiere los mayores estándares de calidad y la incorporación de tecnologías. Los ensayos no destructivos son pruebas que se llevan a cabo en materiales fundamentalmente metálicos sin alterarlos. Están muy relacionados con el mantenimiento preventivo y con evitar daños catastróficos. Son clave para el buen funcionamiento de industrias pesadas como las de transporte, petróleo y gas”. Como ejemplo, mencionó que la PyME hace radiografías industriales y utiliza ultrasonido para verificar las suturas de los caños que transportan combustible. Entre sus clientes hay gigantes como YPF y Shell.
Fraile acota que en el país los métodos y tecnologías que se emplean en estas inspecciones todavía son bastante artesanales. De ahí su interés en promover un cambio, tomando como aliados a las universidades y al conocimiento que se genera en ellas. Es que, para el empresario, estas vinculaciones son centrales para el desarrollo de tecnologías novedosas y de personal más calificado.
Fraile explica que en el mundo se imponen los llamados “ensayos no destructivos avanzados” y lo que viene haciendo con la UNTREF y otras instituciones va en esa dirección. Esta nueva tendencia se nutre de equipos automatizados de radiografía digital y de ultrasonido, así como de sensores y software para la monitorización remota que hacen mucho más eficientes los procesos.
El nuevo software radiográfico se enmarca en esa línea, al igual que un proyecto tecnológico anterior que ENOD le encomendó al Laboratorio de UNTREF: un simulador para entrenamientos en ensayos de ultrasonido que permitió mejorar la formación interna de técnicos sin los riesgos ni los costos asociados con la práctica directa. Pero como indica Fraile, detrás de estos desarrollos tecnológicos hay un objetivo más ambicioso para la empresa. "Ya no haríamos netamente el servicio, venderíamos un producto con el servicio y eso nos permitiría proyectarnos a los países limítrofes, regionalizarnos”, especificó.
“Cuando los equipos técnicos de ENOD se acercaron nuevamente al Laboratorio de Innovación y Fabricación Digital de UNTREF, tenían una necesidad puntual: contar con una herramienta propia que agilizara y unificara el análisis de imágenes radiográficas, especialmente aquellas obtenidas con equipos digitales de origen coreano que no siempre ´dialogaban bien´ con el software genérico disponible en el mercado”, sostuvo el socio gerente de la Pyme. Y agregó: “El problema no era menor. Los procesos de inspección demandaban tiempo, múltiples programas sin integración y criterios de análisis difíciles de estandarizar”.
Por su parte, Alejandro Bottini, el coordinador del Laboratorio, sostuvo: “El objetivo era optimizar la interpretación de las radiografías, detectar defectos con mayor precisión y asegurar que cualquier técnico pudiera trabajar bajo los mismos parámetros”. El resultado es una herramienta integral, basada en tecnologías de código abierto, construida prácticamente desde cero pero apoyada en Python como lenguaje base, librerías de procesamiento de imágenes -como OpenCV y Pillow-, frameworks de interfaz gráfica modernos -como PyQt- y módulos de análisis numérico -como NumPy-. Bottini destaca que esta base abierta tiene un valor estratégico: “Nos permitió garantizar compatibilidad, reducir costos y enfocarnos en desarrollar las funciones específicas que ENOD necesitaba, sin quedar atados a paquetes propietarios ni a licencias caras”, dijo.
De acuerdo con Bottini, se trató de un desarrollo completamente colaborativo. ENOD aportó casos reales, radiografías, protocolos de inspección y necesidades específicas; el equipo de la UNTREF propuso arquitecturas, prototipos y mejoras sucesivas. Hubo reuniones periódicas, validaciones conjuntas y un ida y vuelta continuo. Para el coordinador del laboratorio, fue “un ejercicio en el que la experiencia profesional de la empresa y la capacidad técnica de la Universidad se potenciaron mutuamente”.
Estos casos demuestran que, cuando las universidades y las empresas se sientan a conversar, la innovación deja de ser un concepto abstracto y se materializa en herramientas concretas, capaces de mejorar el desempeño y el posicionamiento de nuestras PyMES.

